Digital Logos Edition
El propósito de este curso es ayudar a los predicadores a presentar mensajes que cambien vidas y que les conecten con el mundo que les rodea. El curso se centrará en la presentación de mensajes que son verdaderos, claros, interesantes y relevantes. Los estudiantes serán desafiados a presentar mensajes que sean fieles a la intención y poder de la Escritura. El curso también examinará la cultura posmoderna y ofrecerá ayuda en hacer mensajes relevantes a las necesidades y a las preocupaciones de esta audiencia.
“Segundo, se puede tener confianza en la Biblia porque da sentido a nuestro mundo y a nuestras experiencias.” (Page 24)
“Cómo ven, entonces la verdad las personas modernas? El punto de vista moderno de la verdad dice que la verdad está ligada a la ciencia. La verdad es solamente verdad cuando puede ser explicada objetivamente, probada científicamente, y entendida racionalmente. La fe en misterios, un Dios invisible, y las cosas espirituales, está fuera de los confines de la razón y de la ciencia y no puede ser verdad suprema.” (Page 16)
“Debido a esta infiltración del modernismo en la cosmovisión cristiana, la presentación del evangelio tiene desafíos. Primero, la fe se ve con una medida de escepticismo. Segundo, gran parte del mundo occidental ve a la iglesia como una institución moral, que no tiene vínculo o respuesta ante la ciencia. Tercero, la religión es vista como un asunto de fe personal, mientras que la ciencia se ve como principios objetivos y verificables, a los cuales toda persona racional puede adherir.” (Page 16)
“El renacimiento acentuó la capacidad de conocer, aprender y crear, y esta edad marcó una oleada de interés por hacer preguntas y descubrir respuestas.” (Page 15)
“En el 1400, el mundo occidental comenzó a alejarse de un período ahora denominado la Edad Media. Aunque el aprendizaje existía todavía en la Edad Media, la mayoría de la educación, ideales políticos, y vida social giraban alrededor de la iglesia. El clero era responsable de la educación y de la religión, y su influencia afectaba directamente a los que estaban en los altos puestos políticos. La teología era considerada como la ‘reina de las ciencias’ y era estudiada tanto por su percibida importancia en el mundo como por verdadera devoción religiosa (Olson 1999, 312). Nadie se atrevía a contradecir las enseñanzas de la iglesia, y la mayoría de las personas mantenía algún tipo de conexión con ella.” (Page 15)