Digital Logos Edition
La serie comentario al Nuevo Testamento por William Hendriksen y Simon Kistemaker representa un encomiable esfuerzo en el área de la exégesis bíblica. Cada tomo tiene la virtud de entregar un análisis completo de cada versículo, pero que a la vez es claro y fiel a las Escríturas. Entre sus características notables podemos mencionar: una introducción completa a cada libro, un comentario de verdadera erudición y simplicidad de expresión, un resumen de cada capítulo, bosquejos y notas críticas. La serie representa una herramienta bíblica indispensable para el estudiante serio de la Biblia, sea pastor o laico.
“Jesús mismo comenta lo que significa libertad. Se es libre cuando el pecado no lo domina a uno, y cuando la palabra de Cristo domina el corazón y la vida (versículos 34, 35, 37). Se es libre, por consiguiente, no cuando se puede hacer lo que se quiere, sino cuando se desea y puede hacer lo que se debe hacer.” (Page 317)
“Para que la mujer quisiera el agua viva, tenía que haber sed primeramente. Y esta sed no se despertará verdaderamente hasta que haya un sentido de culpabilidad, una conciencia de pecado. La mención de su marido es el mejor medio de hacer recordar a esta mujer su vida inmoral. El Señor se está dirigiendo a su conciencia.” (Page 176)
“Pues bien, Nicodemo pertenecía a este partido de salvación por obras. Su posición era prominente. Era un principal entre los judíos. Cf. también 1:10 y 7:50, lo cual indica que era miembro del Sanedrín, y también escriba: es decir que su profesión era estudiar, interpretar y enseñar la ley.” (Page 142)
“Jesús contesta que lo que importa no es dónde se debe adorar, sino la actitud del corazón y la mente, y la obediencia a la verdad de Dios en cuanto al objeto y el método de adoración. No es el dónde, sino el cómo y el qué lo que realmente importa.” (Pages 178–179)
“Aun cuando los fariseos interpretaban correctamente muchos puntos doctrinales—el decreto divino, la responsabilidad moral y la inmortalidad del hombre, la existencia de espíritus, recompensa y castigo en la vida futura—, y habían producido hombres de mucha fama—Gamaliel, Pablo, Josefo—, cometían, sin embargo, un trágico error fundamental: hacían de la religión algo externo. Con demasiada frecuencia consideraban que el conformismo externo a la ley era el propósito de la existencia.” (Page 141)